Concepto

En los círculos profesionales, los relojes monoaguja gozan de un valor especial. Desde siempre, el reloj de sol y la brújula no necesitan más que una sola aguja. Algunas torres de iglesia también recuerdan aún esta tradición. En 1986, el diseñador Klaus Botta desarrolló el primer reloj de pulsera en todo el mundo con una esfera monoaguja.
Los relojes monoaguja fomentan el manejo consciente del tiempo. Este es precisamente el motivo por el que el precursor y desarrollador de la filosofía MENTOR.I, Horst Thurau, elige el concepto del reloj monoaguja como medio. El reloj monoaguja concebido por él, MENTOR.I, no solo sirve de cronómetro, sino que abre una plataforma para la propia orientación de los valores.

La idea nació a partir de diferentes caminos. Después de afrontar un cáncer y padecer agotamiento, Horst Thurau quiso crear una obra para sus trabajadores que sirviese para la profilaxis. La orientación inicial de work life balanceno respondía aún a su exigencia. Así, en su desarrollo posterior surgió, finalmente la filosofía MENTOR.I. Se considera deliberadamente una oferta de orientación inspiradora y no un modelo.
Este énfasis se fundamenta en la responsabilidad reforzada del individuo: las interpretaciones justificables tienen prioridad ante unas reglas y prohibiciones demasiado rígidas. De este modo, el enfoque se centra siempre en la reflexión en un alto nivel de autoestima así como la responsabilidad en sí mismo y la comunidad.

Nacido en una zona minera, el empleado de banco, oficial de telecomunicación y entrenador de fútbol se hizo empresario en 1977. El seguimiento de nuevas empresas, el asesoramiento de empresas y personal así como las funciones consultivas son parte de su pasión profesional.
El navegante apasionado es tan vanguardista como fan de las marcas distintivas. La dilatada antigüedad de sus empleados enorgullece especialmente a este hombre de familia.

La curiosidad, el impulso creativo y la confianza son y han sido sus características definitorias.

Nacemos ya como individuos. Sin embargo, la propia identidad se despierta a lo largo de una vida, también como resultado de la suma de decisiones y actos personales. Está abierta al crecimiento y al cambio – incluida la oportunidad de actualización, diseño y nueva orientación.

Precisamente a este proceso remite el reloj MENTOR.I: tu huella dactilar en la esfera aclara que es tu tiempo el que tú configuras, tus valores por los que actúas. ‟Carpe diem” exclamaba un filósofo romano, ‟aprovecha el día”. Como un eco te lo advierte este reloj atemporal y, al mismo tiempo, actual.
De este modo el reloj se convierte en un acompañante diario, independiente de la generación y en todas las situaciones de la vida. Constante y disponible te recuerda: ¿quién eres? ¿qué quieres hacer de ti? ¿quién quieres ser?
Un símbolo manifiesto de ello es tu huella dactilar inconfundible que convierte el reloj en un original: al igual que tú eres único como individuo, el reloj también lo es como pieza única.

Esta obra conjunta estética solo la lleva una persona en este mundo – tú.